Diario: Suecia

Ha pasado un mes y aún sigo editando fotos. No me creo que este viaje fuera real. Yo sola, tan lejos, recorriendo un país nuevo.

El paisaje de Kiruna
En Madrid no nieva, así que ya de entrada no estoy acostumbrada a ver todo cubierto de blanco, pero es que lo de Kiruna es otro mundo. El día que me iba de allí pensé: retén en tu cabeza todo esto tanto como puedas, porque no vas a volver a ver nada igual. En noviembre tuve unas 4-5 horas de luz, pero esas horas se van acortando hasta que a finales de diciembre llegas a ver el sol tan solo 15 minutos. No sé, me parece algo sencillamente mágico.



Kanelbulle
Páginas y páginas leyendo cómo los protagonistas de las novelas tomaban café acompañado de kanelbulle, o bollos de canela. No podía ir a Suecia y no desayunar/merendar eso mismo.



Las tiendas de Gamla Stan, Estocolmo
Da igual qué esquina dobles, siempre habrá alguna tienda o galería de arte que llame tu atención. Me encantó pasear por esas calles laberínticas y empedradas y descubrir un montón de cosas, desde callejones estrechísimos con escaleras empinadas, hasta un restaurante vikingo pasando por una tienda de recuerdos regentada por una japonesa majísima. También me gustó mucho el Stortorgets julmarknad, o lo que es lo mismo, el mercado navideño que ponen en la plaza de Stortorget.





Kungsparken, Malmö
Me sabe mal decirlo ahora, pero de Malmö no esperaba nada. Por las fotos me parecía bastante fea y por eso planifiqué tan solo una pequeña parada allí. Pasar la noche, ver un poquito la ciudad y coger de nuevo el tren. Fue un acierto no pasar más de un día allí, pero también lo fue aventurarme a recorrer las calles y, sobre todo, adentrarme en uno de sus parques. Yo no sabía que había un molino (no sabía nada, de hecho, porque, como digo, Malmö no me interesaba y no busqué información) ni que un parque pudiera ser tan bonito.


Vistas de "Dinamarca"
Hablemos de cuando la amable señora que me dio el mapa de Malmö me comentó que, si iba a la zona en la que se encuentra el Turning Torso, tendría unas bonitas vistas de Dinamarca. Lo único que se veía en el horizonte eran nubes, porque el cielo fue de color blanco y gris hasta casi el final de mi viaje. Pero tengo que reconocer que el lugar me dio muchísima paz, ya que está alejado de todo y no había nadie por allí.




Göteborg
La ciudad entera, así, tal cual. Al llegar allí decidí que, si lo de vivir en Alemania en un futuro salía mal, mi destino sería ese.  





El significado del viaje

Tengo una servilleta de una cafetería en la que escribí con lápiz de ojos "el año que viene viajaremos a los países nórdicos". Una promesa hecha en un momento de euforia, tan improvisado todo que quisimos ponerlo por escrito y tuvimos que tirar de lo que había a mano. El caso es que, por diversos motivos, ese viaje nunca se realizó y han pasado años desde entonces. El plan era una ruta por 2 o 3 países; yo quería ir a Suecia concretamente por toda la novela negra que he devorado por culpa de -o gracias a- la madre que tengo. Suecia es Camila Läckberg, Asa Larsson, Stieg Larsson, Mari Jungstedt. Es obsesión por los vikingos y por el idioma y amor absoluto por el paisaje y el clima. Así que, en cierto modo, recorrer los cuatro puntos cardinales de Suecia es un sueño cumplido.



Comentarios

  1. Qué bonitas parecen todas las ciudades, en especial Kiruna y Göteborg. Me despiertan el hambre de viajar y aunque no sea fan de las novelas suecas, sé lo mágico que es visitar un sitio que primero has conocido en tinta y letra.

    ¡Abrazo!

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