Fin de semana en Londres

M tenía muchas ganas de hacer este viaje, así que se lo regalé por Reyes + cumpleaños (como siempre, gracias a la antelación y las ofertas, que una no es rica)

Volamos hasta Heathrow, desde donde cogimos un tren para llegar a nuestro hotel, cerca de Hyde Park. El primer día lo dedicamos a conocer la zona más próxima al hotel, cenamos en un restaurante de la zona - donde comí por primera vez el decepcionante fish and chips - y tuvo lugar el intento de tomar una cerveza. Pero se quedó en eso, en intento, porque nos dijeron que iban a cerrar y ya no servían más. Sigo sin acostumbrarme a que en España tenemos unos horarios distintos al resto. Después de ese paseo por el que sería nuestro barrio durante esos días acabé como es habitual ya: enamorada de las fachadas, los grandes ventanales, las calles amplias y tranquilas. ¿Superaré algún día mi fijación por las fachadas? Lo dudo mucho.





Nuestra ruta turística de verdad la iniciamos bien temprano al día siguiente, comenzando, cómo no, en Hyde Park. Al ir en invierno el tiempo no acompañaba en absoluto porque, aunque no llovía, sí había bastante viento, así que el paseo por el parque no fue lo que se dice agradable. Ojalá volver en otra época del año.

Dedicamos la mañana a ver el Palacio de Buckinham, la Abadía de Westminster, el Big Ben y el London Eye. Para comer nos fuimos hasta Camden, que se convirtió en mi lugar favoritísimo de la ciudad, como era de esperar. Era difícil resistir a la tentación entre tanta ropa, tatuajes y piercings y bueno. Cosas de mi estilo. Pero me acabé volviendo a casa solo con un vestido rollo pin up porque esos vestidos son lo más maravilloso que existe en este mundo, no me podéis decir que no. Además me lo regaló M, así que además de bonito, tiene mucho valor sentimental para mí. Allí mismo, en Camden, asistimos a un concierto en plena calle de un grupo que después hizo una pequeña gira para tocar en otras ciudades.




Después saqué mi lado Potterhead y fuimos a King's Cross y a la tienda de Harry Potter donde me surtí de grajeas multisabores, llaveros de las reliquias de la muerte y la snitch dorada...no me llevé toda la tienda porque no podía. Esa saga significa mucho para mí porque la empecé a leer con la misma edad que el protagonista, cosa que me hizo mucha ilusión en su momento, y fui creciendo con él. Es una parte muy importante de mi infancia/adolescencia y he leído todos los libros 7 veces. Por si alguien se lo pregunta: soy una orgullosa Slytherin.




Continuamos el día intenso de turismo visitando Whitechapel - porque no solo soy fan de Harry, también de la historia de Jack el Destripador, es algo que me fascina y horroriza a partes iguales - la Torre de Londres, el Tower Bridge y haciendo una foto panorámica de los edificios de la City antes de dirigirnos a Piccadilly para acabar el día.

En el tercer y último día visitiamos Covent Garden y volvimos a Camden. Sí, con el tiempo justo en una ciudad tan grande repetimos en lugar de ver zonas nuevas. Nos gustó demasiado y acabamos tomando un brunch allí. También en ese barrio me compré un libro porque en teoría compro un libro en cada lugar que visito, ese es mi recuerdo, pero en la práctica no lo cumplo. Menuda ruina sería. A pesar de eso, tengo libros de: Irlanda, Inglaterra, Alemania, Portugal y Suecia. Volviendo a las calles londinenses, encontramos unos puestos callejeros de comida internacional - no sabría decir dónde - y acabamos sentándonos a comer algo para reponer fuerzas al sol. Sol en Londres. Parecía imposible, pero así fue.


Mi opinión sobre Londres fue variando a lo largo de los tres días. El primero no me hacía mucha ilusión estar allí - como decía, todo fue por M - luego pensé que "mñé, no está mal, pero no es para tanto" y acabé diciendo que tenía que volver algún día para ver todo lo que queda. ¡Incluso lo echo de menos!

¿Habéis estado en Londres? ¿Qué es lo que más os gustó?

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